Taller Encantado

English cv French German Spain Italian Dutch Russian Portuguese Japanese Korean Arabic Chinese Simplified

25 de febrero de 2009

Dalí dixit

"Eco y Narciso" de John William Waterhouse


"[...] Cuando la anatomía clara y divina de Narciso se inclina sobre el espejo oscuro del lago, cuando su blanco torso doblado hacia delante se paraliza, helado, en la curva argentada e hipnótica de su deseo, cuando pasa el tiempo sobre el reloj de flores de la arena de su propia carne. Narciso se aniquila en el vértigo cósmico en lo más hondo del cual canta la sirena fría y dionisíaca de su propia imagen. El cuerpo de Narciso se vacía y se pierde en el abismo de su reflejo, como el reloj de arena al que no se dará la vuelta.
Narciso, pierdes tu cuerpo, arrebatado y confundido por el reflejo milenario de tu desaparición, tu cuerpo herido mortalmente desciende hacia el precipicio de topacios de los restos amarillos del amor, tu blanco cuerpo, engullido, sigue la pendiente del torrente ferozmente mineral de negras pedrerías de perfumes acres, tu cuerpo... hasta las desembocaduras mates de la noche al borde de las cuales ya destella toda la platería roja de las albas de venas rotas en «los desembarcaderos de la sangre». Narciso, ¿comprendes? La simetría, divina hipnosis de la geometría del espíritu, colma ya tu cabeza con ese sueño incurable, vegetal, atávico y lento que reseca el cerebro en la sustancia apergaminada del núcleo de tu próxima metamorfosis. La simiente de tu cabeza acaba de caer al agua. El hombre regresa al vegetal y los dioses por el pesado sueño de la fatiga por la transparente hipnosis de sus pasiones. Narciso, tan inmóvil estás que parecería que duermes. Si se tratara de Hércules rugoso y moreno, se diría: duerme como un tronco en la postura de un roble hercúleo. Mas tú, Narciso, formado por tímidas eclosiones perfumadas de adolescencia transparente, duermes como una flor de agua. Ahora se aproxima el gran misterio, ahora tendrá lugar la gran metamorfosis. Narciso, en su inmovilidad, absorto en su reflejo con la lentitud digestiva de las plantas carnívoras, se vuelve invisible. No queda más de él que el óvalo alucinante de blancura de su cabeza, su cabeza de nuevo más tierna, su cabeza, crisálida de segundas intenciones biológicas, su cabeza sostenida con la punta de los dedos del agua, con la punta de los dedos, de la mano insensata, de la mano terrible, de la mano coprofágica, de la mano mortal de su propio reflejo. Cuando esa cabeza se raje, cuando esa cabeza estalle, será la flor, el nuevo Narciso, Gala, mi narciso".

Fragmento del primer poema conocido de Dalí
Traducción al castellano de Edison Simons
© Salvador Dalí, Fundació Gala-Salvador Dalí, Figueres, 2008


Si os ha gustado el cuadro de Waterhouse... No os perdáis la exposición del Prado de los cuadros prerrafaelistas, habrá algunos cuadros impresionantes, muy difíciles de ver en otras circunstancias... ¡saludos! Os doy un adelanto:


"Sol ardiente de junio" de Frederic, Lord Leighton
Óleo sobre lienzo, 119 x 119 cm
San Juan de Puerto Rico, Museo de Arte de Ponce

20 de febrero de 2009

Wilde ante una hoja en blanco


Y es que esto de escribir es lo que tiene, ya lo dijo el maestro:

"No existen más que dos reglas para escribir: tener algo que decir y decirlo".
Oscar Wilde (1854-1900)


De modo que mi más sincera enhorabuena a Eva por la próxima publicación de su libro De la vida y otros viajes, cuya evolución podéis seguir en su blog:



El alma necesita también su alimento. Así que en plan Scarlett O'Hara, con el rábano en la mano diré que no volveré a pasar hambre de literatura nunca más, porque eso sería lo más cercano que se antoja a la muerte.

18 de febrero de 2009

Palabras que llaman a otras palabras

La casualidad no existe amigos... son las palabras, nuestras compañeras cotidianas, las que se atraen entre sí. A veces no hace falta formularlas en alta voz puesto que el mero pensamiento hace que la deixis en fantasma de pronto se transforme en una sincronicidad. ¿Qué diría Auster? No lo sé.
Os cuento: como sabéis estoy haciendo un master en el que hemos creado una editorial ficticia. Se llama Cronopia Editores, en homenaje a nuestro amigo Julio Cortázar. En fin, tenemos que seguir los pasos habituales para la edición de una obra y hemos escogido "Rosas blancas para Wolf". El caso es que una tarea era leer la obra, documentarla y escribir una reseña sobre ella. Bien, la leí en dos tardes, porque me enganchó mucho (para quien no lo sepa tengo una relación de amor-odio con el nazismo: me repugna sobre todas las cosas, pero me fascinan las obras que versan sobre esa época... he visto mil pelis: "El juicio de Nüremberg", "Odessa", documentales sobre los campos de concentración y exterminio, entrevistas a supervivientes... en fin, de todo un poco). Me temo que esa fascinación nace directamente de mi incapacidad para comprender las atrocidades que se cometieron y que busco y rebusco una explicación, sin otro fin que golpearme la testa contra el muro de tanta inhumanidad. La obra habla, entre otras muchas cosas, de una organización que yo no conocía: la Rosa Blanca. Se trataba de una suerte de resistencia pacífica nacida en la Universidad de Münich, encabezada por estudiantes disidentes del régimen, cuyo final podéis imaginar. Pues era la primera vez que oía algo sobre el tema y me meto en el metro pensando en la valentía de aquellos pacifistas y ¡ZAS! tengo una mujer enfrente leyendo un libro que se titula: "LA ROSA BLANCA". ¿Podéis imaginar mi desconcierto? He estado a punto de levantarme y preguntarle ¿Dónde esconde la cámara, señora?
No os dejéis engañar, no poseemos las palabras, ellas nos poseen a nosotros, nos zarandean y nos llevan donde quieren. Por el momento yo me dejo llevar ¿qué otra cosa puedo hacer?

17 de febrero de 2009

Flores de la pluma

Leer, leer, leer, vivir la vida
que otros soñaron.
Leer, leer, leer, el alma olvida
las cosas que pasaron.

Se quedan las que quedan, las [ficciones,
las flores de la pluma,
las solas, las humanas creaciones,
el poso de la espuma.

Leer, leer, leer; ¿seré lectura
mañana también yo?
¿Seré mi creador, mi criatura,
seré lo que pasó?

Miguel de Unamuno

Una de cal y otra de risas

Estamos muy metafísicos últimamente, así que escribo para haceros un recordatorio... mañana vuelven a la carga los pirados de Muchachada Nui, que se vislumbra, junto a la absurdez del tío la vara, como el único desahogo de cachondeo de la semana. Estoy deseando conocer a la Abuela Caraváter...




Vuelven las series, chavales: ahí estamos padeciendo de nuevo a House, riéndonos de la pobre Susan Meyer y en breve a cuestas con el protago de Life y su desmesurado karma.

Hay que reír más, que es la mejor cura para el alma, nos faltan humoristas aunque nos sobra ingenio. Hacer a otro reír es el mejor regalo que se le puede hacer, como dice una amiga mía el tiempo que uno pasa riendo, es tiempo que pasa con los dioses.

Si os apetece salir a reír, podéis acercaros al Festival del Opti-Mismo (XIX Muestra Iberoamericana de Narración Oral Escénica) en el Teatro Fernán Gómez en la Plaza de Colón del 27 de febrero al 1 de marzo.

¡Besos y risas desde mi cueva!

16 de febrero de 2009

Cuando el amor no se termina

Ayer volví a ver Brokeback Mountain y no pude dormir. Tenía ganas de llorar todo el rato y se me venía a la mente de forma constante el plano de Ennis del Mar y de Jack Twist abrazados en la montaña, libres sólo en la naturaleza, al margen de la sinrazón de las reglas de la ciudad.

Ya me produjo un gran impacto cuando la vi por primera vez. Me parece magistral la forma de narrar, cómo los paisajes, la nieve, el frío, los ríos y los cielos se convierten en metáfora constante de una relación de amor que todo lo supera a lo largo del tiempo. Es asombroso el poder de la imagen en Ang Lee, cómo es capaz de otorgarle su justo valor a las palabras dándole el protagonismo absoluto a cada minuto del metraje.

Cuando ves esta película sientes una honda pena por el amor imposible pero inevitable que atormenta y apasiona a los protagonistas pero, como todas las obras maestras, te lleva un paso más allá a la reflexión sobre el Amor, sobre la fidelidad, sobre las convenciones, sobre la libertad... son las decisiones que tomamos en la vida las que nos conducen hacia el lugar en el que nos encontramos.

No siempre tenemos las riendas, pero en cualquier caso, parece obvio que merece la pena morir, ser apaleado o vilipendiado si a cambio uno es coherente consigo mismo y lucha por lo que quiere sin herir a los demás. Ennis sólo se da cuenta de esto cuando pierde a Jack, pero al menos la experiencia le sirve para recuperar su relación con su hija.

Creo que lo que más me gusta de esta película es la sinceridad brutal del sentimiento amoroso: los celos, pero también la pasión, a veces totalmente violenta, también la ternura, el calor, la amistad, la complicidad... Con estos mimbres se teje una historia en la que las vidas fluyen mientras la esencia del amor se mantiene. Alguien dijo que el amor era precisamente convertir en eterno lo mudable.

No me despido sin dejaros colgado uno de los fotogramas más hermosos de la película, esa imagen recurrente que os decía que no me ha dejado pegar ojo. Y de paso una recomendación literaria: "Palabras de amor" del filósofo Marina, una recopilación de misivas amorosas de los escritores más afamados de todos los tiempos y una reflexión sobre el propio amor.

¡¡¡Amor, amor, amor!!! Tú mueves el mundo y puedes paralizarlo; eres fuente de vida y destrucción... A nada debemos temer más que al amor, nada debemos desear más que el amor... nos aterras, confundes nuestros sentidos, nos arrastras y nos llevas... y sin embargo somos por ti y para ti.

15 de febrero de 2009

Lolita y Lulú

¡¡¡Nuevas fotos de nuestras niñas!!!

Juan las quiere mucho, tanto que a veces se queda mirándolas y se le olvida ir al trabajo (jejeje).

Son muy inquietas, como todos los jerbos. Les encanta hacerse su casita, comer pipas y pan de maíz y corretear por el sofá y por la terraza. Han colonizado el tubo del pingüino, que ha pasado a ser su residencia de verano, como dice Juan. Así que nada, aquí las tenéis... Lolita (que tiene aproximadamente un año) es hija de Lulú, un año mayor. Lolita es la de pequita blanca en la cabeza. Es también un tanto menos ágil que su madre, que da unos saltos espectaculares.



13 de febrero de 2009

Mi amigo Darwin

Ya sabemos que estamos sujetos al cambio, nos sabemos objeto de la evolución, no hay más que echar la vista atrás dos o tres generaciones para corroborar que nuestros hábitos de consumo, nuestro ocio, nuestra forma de vivir, en suma, nos sumerge en toda clase de variaciones que nos hacen diferentes a como éramos hace un siglo. Estos procesos, jalonados de vez en cuando por un hito histórico no se producen jamás de espaldas a la sociedad en la que emergen y como tales pueden ser utilizados de muy diferentes maneras en ocasiones, lamentablemente en pro de un interés material.

Mi amigo Darwin lo sabía, pero era valiente. Luchó contra sí mismo, contra sus propias creencias que hacían que sus descubrimientos le resultaran algo más que incómodos y tuvo que luchar para ser escuchado y comprendido. Sus teorías no son la respuesta final, porque nadie tiene todas las respuestas, pero abrió un camino a la investigación y propuso algunas explicaciones que tratan de esclarecer los misterios de la vida y en concreto, del origen de la misma.

Pensemos en las propias especies próximas al homo sapiens, los recientes descubrimientos como el del homo floreriensis o el de la fonación del homo neanderthalis. Si hemos convivido con especies con las que lo compartíamos todo, incluso la capacidad de abstracción y del lenguaje ¿por qué seguimos empecinados en pensar que somos la creación divina de un ente superior (y por ende inaprehensible)?

El hombre es por naturaleza pequeño, mucho más de lo que se cree y muchas veces, su tendencia cuando se encuentra con una de las grandes preguntas que pergeña su cabecita tiene el reflejo de achacarlo a una voluntad superior y todopoderosa. ¿Quiénes somos?, ¿de dónde venimos?, ¿qué finalidad tiene mi existencia si ha de tenerla?, ¿estamos solos?, ¿siempre lo estuvimos?, ¿hacia dónde nos llevan nuestros pasos? La resignación ante una figura primordial, incognoscible y omnipotente se hace inevitable en primera instancia. Admito que quizá nunca lleguemos a comprender muchas cosas, pero no debemos perder la voluntad de hacerlo, lo contrario nos anega en la abulia más absoluta y desde luego en la ignorancia más peligrosa: la voluntarista.

Empeñarse en avanzar o empeñarse en retroceder. Esa es la cuestión.

12 de febrero de 2009

Sitges y el mar

Arriba y abajo, el cielo y su espejo, el mar, se funden.
El vagar de los anhelos y el frío suelo son uno solo al caminar.
Levanta la mirada, déjala volar, o clávala en el suelo, no dejes de soñar.

Kafka siempre duele

Desconfía de las respuestas simples que pretenden resolver cuestiones complicadas. Esa es la gran razón que me ha llevado a renegar del dogmatismo que con el parche de la fé ciega trata de ocultar su propia ceguera ante la realidad (si es que convenimos en que hay una realidad cognoscible).
Como Samsa panza arriba intento rodar sobre mi grueso caparazón para dar con las patitas en el suelo y, la menos, recuperar la perspectiva. Del otro lado de mi ser quedan las vagas luces de lo que fue otrora la flamante felicidad y es hoy la representación de una comedia sin sentido.
Samsa murió de pena, no lo mató (solo) el hambre.

11 de febrero de 2009

Jo, qué frío

Al fin he descargado las fotos de la cámara... nada como una baja de una semana para sacar el tiempo necesario. También he leído, he dormido (mucho) y he pasado tiempo con Juanito... Ahora vuelvo a la carga y lo hago para enseñaros la nieve a través de mi lente...
















2 de febrero de 2009

Saber ganar y saber perder

Ayer creo que las lágrimas de Federer nos llegaron a todos muy dentro (incluyendo a su rival) porque es un gran tenista y un gran caballero, dentro y fuera de la pista. La amistad que le une a Nadal hizo que ambos sintieran empatía el uno por el otro. Ni Roger quiso acaparar el momento final con sus palabras, retomando el discurso para dejar al campeón hablar en último lugar, ni Rafa quiso hacer una gran fiesta en uno de los momentos moralmente más bajos para su competidor.
Esa es la esencia del deporte: compañerismo, caballerosidad, saber diferenciar la vida personal de la profesional. Disfruto todas y cada una de las veces que veo un duelo de titanes del calibre de Federer vs. Nadal porque más allá del juego veo humanidad, respeto y una amistad muy bonita que permite no obstante ver el mejor tenis de ambos. Y ver a Federer demostrar sus sentimientos, su abatimiento y su posterior recuperación gracias al abrazo de Nadal fue sencillamente muy bonito.
Tome nota quien lo estime oportuno y que cunda el ejemplo, siquiera, en el mundo del deporte.

Sitios que he visitado