Ciprés alto y airoso,
flor de corola oscura,
joven de ojos más negros
que la noche sin luna.
¿Ves ese vellón blanco
que leve el aire empuja?
Así pasan los días
para no volver jamás.
Menos pronto la rosa
de galas se desnuda
si llueve, menos pronto
se ve la arena enjuta,
que de la vida pasan
placeres y amarguras
semejantes a un sueño
que concluye en la tumba.
¡Tan solo Dios es grande!
Si quieres que la pluma
de un arcángel escriba
tu vida santa y pura;
de las pasiones huye
que son mortal cicuta,
y el espíritu alado
remonta a las alturas.
El cuerpo es para el alma
prisión triste y oscura,
dichoso el que la rompe
de luz y amor en busca.
Dichoso el que a Dios sube
y en su esplendor se inunda
y confundidos arden
como dos llamas juntas.
flor de corola oscura,
joven de ojos más negros
que la noche sin luna.
¿Ves ese vellón blanco
que leve el aire empuja?
Así pasan los días
para no volver jamás.
Menos pronto la rosa
de galas se desnuda
si llueve, menos pronto
se ve la arena enjuta,
que de la vida pasan
placeres y amarguras
semejantes a un sueño
que concluye en la tumba.
¡Tan solo Dios es grande!
Si quieres que la pluma
de un arcángel escriba
tu vida santa y pura;
de las pasiones huye
que son mortal cicuta,
y el espíritu alado
remonta a las alturas.
El cuerpo es para el alma
prisión triste y oscura,
dichoso el que la rompe
de luz y amor en busca.
Dichoso el que a Dios sube
y en su esplendor se inunda
y confundidos arden
como dos llamas juntas.
Versos encontrados en el mes de mayo de 2010 y atribuidos a Bécquer en honor a una buena persona que espera un mágico y liberador momento.