Taller Encantado

English cv French German Spain Italian Dutch Russian Portuguese Japanese Korean Arabic Chinese Simplified

16 de octubre de 2009

La tierra de los caballos bellos I

Decía nuestro guía Mehmet que todos los mundos posibles están en éste y en concreto, todos se encuentran en la Capadocia, en la Anatolia Central, cuyo nombre etimológicamente hace referencia a "la tierra de los caballos bellos".


Visitando la región uno no puede sino sorprenderse por la increíble belleza de los parajes que la naturaleza ha ido esculpiendo pacientemente lamiendo con los vientos las rocas y azotándolas con el refulgente sol y las nieves invernales.


Por si esto de por sí fuera poco, el espectáculo visual lo completa la mano del hombre que, en medio del desierto y precisamente buscándolo como refugio, ha constituido joyas como las que pueden observarse en el Museo al Aire Libre de Göreme. Allí se suceden las ermitas afanosamente decoradas con frescos espectaculares que invitan a la alabanza allí donde los iconoclastas no fijaron su obsesiva aversión a la representación de los hombres. En aquellas en las que su mano devastadora acometió el grave delito de la destrucción sistemática de manos, ojos y bocas, principales vehículos de la comunicación y el entendimiento, podemos contemplarlas intactas. En el resto, en su lugar, ellos realizaron dibujos geométricos y motivos alegóricos de origen vegetal y raramente animal.

Mención aparte merecen las ciudades subterráneas en las que comunidades enteras de hasta diez mil individuos se parapetaban de sus enemigos pudiendo pasar en ellas meses. Un sistema de trampas trataba de disuadir a merodeadores indesados en tanto que inmensas rocas redondas taponaban los pasos de nivel con la intención de proteger las vidas de cuantos se alojaban allí. Un complejo sistema de ventilación así como la porosa roca que recogía el humo de los fuegos destinados a iluminar y cocinar los alimentos suponían la principal garantía de supervivencia para no ser descubiertos.

La Capadocia es una región hermosísima que a cada paso depara una nueva sorpresa. Y tantas enterradas que quedan por descubrir. Encandila no sólo su belleza sino también la reflexión en la que nos sumerge sobre la complejidad de las relaciones que establecemos las sociedades entre nosotras y el instinto de supervivencia de las más perseguidas que puede llegar a agudizar el ingenio hasta extremos insospechados.

3 comentarios:

Canichu, el espía del bar dijo...

¿has estado allí?

Lolita blues dijo...

Sí, claro, la de la foto soy yo, fue uno de los mejores viajes de tooooda mi vida. Muy recomendable.

Clara dijo...

Parece que te gusto el viaje, yo hice el mismo, el mismo año que tu, unos meses antes y volví encantada. Mi guía también fue Mehmet, aunque no se si hablamos del mismo. Quería saber si tienes su correo mail para poder escribirle, antes estabamos en contacto pero lo perdimos. Gracias.

Sitios que he visitado